Lección 8 - LA CENA DEL SEÑOR ¿Qué deberíamos saber de la Cena del Señor? (Serie doctrina básica)
LECCIÓN 8
LA CENA DEL SEÑOR
26 Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.
1 Corintios 11.26
¿ QUÉ DEBEMOS SABER DE LA CENA DEL SEÑOR?
SU INSTITUCIÓN
El Señor Jesucristo la instituyo y enseño antes de su crucifixión Lucas 22:19-20; 19 Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi
cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. 20 De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.
1 Corintios 11:23-26).
Institución de la Cena del Señor
23 Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan; 24 y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí. 25 Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí. 26 Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.
SU SIGNIFICADO
Para entender su verdadero significado debemos tener en cuenta cuatro miradas:
a) Una mirada hacia atrás, una conmemoración de lo que Cristo hizo por nosotros en la cruz (1 Corintios 11:23-25).
b) Una mirada hacia el futuro, anunciamos su venida “Hasta que él venga” (1 Corintios 11:26).
c) Una mirada hacia adentro, un tiempo de inspección personal y confesión de pecado. (1 Corintios 11:27-32).
Tomando la Cena indignamente
27 De manera que cualquiera que comiere este pan o bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor. 28 Por tanto, pruébese cada uno a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa. 29 Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí. 30 Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos duermen. 31 Si, pues, nos examinásemos a nosotros mismos, no seríamos juzgados; 32 mas siendo juzgados, somos castigados por el Señor, para que no seamos condenados con el mundo.
d) Una mirada hacia afuera, un tiempo especial de comunión con los otros miembros de la iglesia local “Esperaos unos a otros”
(1 Corintios 11:33). 33 Así que, hermanos míos, cuando os reunís a comer, esperaos unos a otros.
LA MUERTE CIENTÍFICA DE JESÚS
Otras fuentes de información:
EL CASO DE CRISTO (Película completa)
Un ateo se convierte a Cristo después de hacer una profunda investigación sobre la veracidad de la fe cristiana.
SUS ELEMENTOS
El pan que representa el cuerpo de Cristo quebrantado por nosotros en su muerte. (1 Corintios 11:24) No se convierte en el cuerpo de Cristo.
La copa, el fruto de la vid, Mateo 26:27-29 27 Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; 28 porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados. 29 Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.
Nos dice que era fruto de la vid, el jugo de uva, que representa la sangre de Cristo derramada por nuestros pecados (1 Corintios 11:25) No se convierte en la sangre de Jesús.
¿QUIENES PUEDEN PARTICIPAR DE LA CENA DEL SEÑOR?
1) Deben ser salvos. (Hechos 2:41-42) 41 Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. 42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.
2) Deben ser miembros de la iglesia por medio del Bautismo.
(Hechos 2:41) 41 Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas.
3) Deben encontrarse en plena comunión con los miembros de su iglesia local. (1 Corintios 11:33) 33 Por eso, hermanos míos, cuando se junten para comer, esperen a que todos estén reunidos.
SU FRECUENCIA
La Biblia no especifica al respecto, no debe importar la frecuencia con que una iglesia celebre esta ordenanza, sino que se celebre su verdadero significado y como el señor Jesucristo ordeno hacerlo, sin convertirla en algo rutinario.
CÓMO CELEBRARLA
De la misma manera que el Señor Jesús lo hizo (1 Corintios 11:23-26). Desde hace mucho tiempo atrás, la Cena del Señor se celebra después del servicio dominical, incluyendo oraciones de agradecimiento y confesión, lectura de la Palabra de Dios, la Cena del Señor misma, el recojo de una ofrenda para los necesitados, y un abrazo de confraternidad.
En 1 Corintios 11:26-33, Pablo instruye con qué actitud se debe celebrar la Cena del Señor: con arrepentimiento, porque recordamos que Cristo murió por nuestros pecados (v. 11:26); dignamente, con reverencia y respecto (v. 11:27); examinándonos a nosotros mismos para ver si tenemos algún pecado sin confesar o alguna actitud de resentimiento (V. 11:28); en unidad considerando otros (v. 11:33).
Pablo, dice que nadie debe tomar indignamente la Cena del Señor, dirigiéndose a los miembros de la iglesia que participan de ella sin pensar en lo que realmente significa.
Nadie es digno de participar de la Cena del Señor, pues todos somos pecadores salvos por gracia, por lo que debemos prepararnos para la comunión por medio de una introspección saludable, confesión de pecado y el arreglo de diferencias con otros, removiendo barreras que afectan nuestra relación con Cristo y con otros creyentes.
Jesús dijo: “Haced esto todas las veces que la bebiereis en memoria de mi”. ¿Cómo debemos recordar a Cristo en la Cena del Señor? Pensando en lo que hizo y por qué lo hizo. Si la Cena del Señor sólo se convierte en un ritual nada más o en un hábito sentimental, ha dejado de recordarnos a Cristo y perdió su significado.
Por lo tanto debemos prepararnos para participar de la Cena del Señor deseando comunión con otros creyentes con nuestras mentes puestas en el marco adecuado.
Antes
Arregle cualquier situación que interrumpa su relación con Dios. Tal vez deba pedir perdón o perdonar a alguien de su familia, su trabajo, la iglesia o su barrio.
Durante
Concentre su mente en el verdadero significado de la celebración y los elementos.
Respete la celebración evite cualquier situación de indisciplina.
Después
Busque la unidad y comunión con sus hermanos en Cristo.
Unión de jóvenes Emmanuel
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